La fotografía boudoir es una expresión íntima y artística de la sensualidad. Nace del deseo de retratar el cuerpo en un ambiente privado, cómodo y cargado de belleza, como si se estuviera en una habitación personal. Más que mostrar, busca sugerir: juega con la luz, las miradas, las texturas y los silencios del cuerpo.
Mi enfoque del boudoir se aleja del estereotipo rígido y se centra en lo real, en lo que cada persona transmite cuando se siente libre y segura. No se trata de cumplir una expectativa externa, sino de conectar contigo misma/o: con tu piel, tu historia, tus formas, tus cicatrices, tus gestos.
Trabajo desde la confianza y el respeto. Cada sesión es una experiencia personal y cuidada, pensada para que te sientas cómoda/o en todo momento. No importa la talla, la edad o el género: todos los cuerpos tienen algo hermoso que decir, y estoy aquí para acompañarte a descubrirlo.